La asistencia a la guardería aumenta no solo la morbilidad, sino también el uso de recursos sanitarios

Sr. Director de la Revista Pediatría de Atención Primaria:

Tras leer el interesante estudio realizado en Asturias por Domínguez et al.¹ sobre el aumento de la morbilidad en los niños que acuden a guarderías, y teniendo en cuenta que en Euskadi hemos realizado un estudio similar analizando también el uso de recursos sanitarios, queríamos aportar esos aspectos que completan el citado estudio. Ambas investigaciones se han realizado sobre la base de un protocolo propuesto por el Grupo de Trabajo de Investigación de la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap) en el año 2009². Durante los años 2009 y 2010 se realizó dicho estudio en Euskadi y en Andalucía. En Euskadi han participado seis centros de salud reclutando a 169 niños.

Los resultados en cuanto a morbilidad son similares a los obtenidos en Asturias. Se ha calculado la morbilidad global (suma de los episodios de bronquitis, otitis media, gastroenteritis, resfriados, bacteriemia y neumonía) de las dos cohortes: asistentes a guarderías y no asistentes. Se han analizado las variables continuas con media y desviaciones estándar (DE) cuando su distribución es normal y con medianas y rangos interquartílicos (Q1, Q3) cuando no lo es. Los datos expresan frecuencias. Vemos que la morbilidad global aumenta en los niños que asisten a guarderías, resultados similares al trabajo de Domínguez et al. (Tabla 1).

Un aspecto no analizado en el estudio asturiano y de interés para los pediatras de Atención Primaria (AP) es que los niños que asisten a guardería aumentan el número de consultas tanto en AP, como a nivel de las Urgencias hospitalarias y también el número de ingresos hospitalarios. La metodología utilizada es similar a la anterior (Tabla 2).

Vemos que los niños que acuden a la guardería tienen un mayor número de ingresos hospitalarios y de consultas en AP. Aunque en esta revisión se observa un aumento del número de consultas en las Urgencias hospitalarias, este aumento no es estadísticamente significativo. La disminución de la presión asistencial en Urgencias cuando los niños no acudían a guarderías ya se había puesto de manifiesto en otro estudio realizado en Euskadi.

Entre septiembre y noviembre del año 2004, a raíz de producirse una huelga en las guarderías de la ciudad de Vitoria-Gasteiz, observaron en el hospital de referencia que en el periodo de tiempo que los niños dejaron de acudir a los servicios de guardería se produjo una disminución de la utilización de recursos sanitarios, a nivel de Urgencias hospitalarias³.

En otro estudio realizado en Euskadi por Lafuente et al.⁴ se observó, igual que en el nuestro, que las visitas al pediatra de AP aumentaban de 6,27 a 10,31 (p<0,0001) en los niños que acudían a escuelas infantiles y que las visitas a Urgencias hospitalarias se incrementaban de 0,41 a 0,64 (p<0,0001), observando también un aumento de los ingresos hospitalarios, que pasaban del 1,7 a 2,5%. A pesar que en ese estudio el aumento no resultaba estadísticamente significativo, en el que hemos realizado nosotros sí se alcanza la significación estadística.

Otro aspecto que nos preocupaba era en qué medida influía la situación laboral de las madres en cuanto a la precocidad del ingreso de los niños en las guarderías. Dividimos los niños en dos grupos, ingreso precoz (entre cero y seis meses) y tardío (entre 7 y 24 meses), y observamos que no existe asociación entre el momento del inicio de la guardería y la formación académica del padre, pero sí con la formación académica de la madre. Cuanta más formación tiene la madre es más probable que el niño empiece en la guardería más precozmente (en los primeros seis meses de vida) (p=0,032). Igualmente, es mucho más probable que las madres que trabajan envíen a sus hijos a la guardería en los primeros seis meses de vida, que las que no lo hacen (p=0,005).

Con esta aportación, pretendemos destacar algunos aspectos que no han sido analizados en el artículo de Domínguez et al., y a la vez reafirmar su conclusión de la necesidad de prolongar el permiso laboral a las madres por maternidad o buscar otras fórmulas de cuidado infantil.

En Euskadi se ha puesto en marcha un sistema denominado “nidos familiares” en el que una persona con una formación y acreditación específica se encarga del cuidado de grupos reducidos de 3-4 niños de cero a tres años⁵. En un futuro habría que hacer una comparación entre este sistema de cuidado infantil y las guarderías tradicionales para ver en qué medida se disminuye la morbilidad y el uso de recursos sanitarios.

AGRADECIMIENTOS

A Kalliopi Vrotsou, de la Unidad de Investigación de Atención Primaria de Gipuzkoa, por la realización del estudio estadístico.

ABREVIATURAS: AP: Atención Primaria.

BIBLIOGRAFÍA

1. Domínguez Aurrecoechea B, Fernández Francés M, Ordoñez Alonso A, López Vilar P, Merino Ramos L, Aladro Antuña A, et al. Influencia de la asistencia a guarderías sobre la morbilidad en niños menores de 12 meses de edad. Rev Pediatr Aten Primaria. 2012;14:303-12.
2. del Castillo Aguas G, Gallego Iborra A, Ledesma Albarrán JM, Gutiérrez Olid M, Moreno Muñoz G, Sánchez Tallón R, et al. Influencia de la asistencia a las guarderías sobre la morbilidad y el consumo de recursos sanitarios en niños menores de dos años. Rev Pediatr Aten Primaria. 2009;11:695-708.
3. Montiano Jorge J, Ocio Ocio I, Díez López I, Montilla Fernández A, Bosque Zabala A. ¿Qué pasaría si cerrasen las guarderías? An Pediatr (Barc). 2006;65:556-60.
4. Lafuente Mesanza P, Lizarraga Azparrena MA, Ojembarrena Martínez E, Gorostiza Garay E, Hernaiz Barandiarán JR, Olascoaga Arrate A, et al. Escolarización precoz e incidencia de enfermedades infecciosas en niños menores de tres años. An Pediatr (Barc). 2008;68:30-8.
5. Haur-etxea. Nidos familiares para el cuidado infantil [en línea] [consultado el 07/02/2013]. Disponible en www.gizartelan.ejgv.euskadi.net/r45-contpfc/es/contenidos/informacion/hauretxea/es_habiak/nidos_familiares.html

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