Vol. 27 - Num. 108
Leído. Libros, revistas e Internet
aCS Dos de Mayo. Móstoles. Madrid. Grupo de Vías Respiratorias de la AEPap.
Publicado en Internet: 17-10-2025 - Número de visitas: 559

En este texto el autor nos recuerda el aforismo de José de Letamendi y Aforrés (Barcelona 1828 - Madrid 1897), catedrático de Anatomía en Barcelona y de Patología General en Madrid que, además, de un médico excepcional, fue también un gran humanista, por lo que en su época fue considerado un genio.
Existe la percepción de que un buen médico es el que está al día del conocimiento científico, maneja su práctica clínica desde la mejor evidencia científica y desde la excelencia técnica. Pero un médico bueno es mucho más que eso. Un médico bueno es el que desarrolla la habilidad para conectar emocionalmente con el paciente (la empatía), indaga sobre los valores y preferencias de su paciente, los incorpora a su relación clínica deliberando con él para poder adoptar la decisión clínica que esté más acorde no solo con la evidencia científica, sino, también, con los valores y circunstancias del paciente.
Como dice el autor: “El doctor que logra adquirir conocimientos más allá de la ciencia en medicina e integra a sus competencias la empatía, habilidad de comunicación, visión holística, aprendizaje y adaptabilidad continuas, ética y humanidades será un gran médico”.