Prurito ocular: lo que una presencia inesperada puede ocultar

INTRODUCCIÓN

El prurito ocular es un síntoma común en la consulta pediátrica asociado habitualmente a procesos inflamatorios o infecciosos. Es esencial, al evaluar este síntoma, no solo considerar estructuras comunes como la conjuntiva, sino también realizar una inspección detallada de los párpados y las pestañas.

RESUMEN DEL CASO

Niña de 3 años que acude a la consulta de Pediatría de Atención Primaria por prurito ocular derecho. Un mes antes la paciente presentó pediculosis del cuero cabelludo (Pediculus humanus capitis), que fue completamente erradicada. Actualmente, la madre observa la posible presencia de liendres en las pestañas. En la exploración se visualizan perlas ovaladas, marronáceas y brillantes, adheridas a la base de las pestañas del párpado superior del ojo derecho (Figura 1). No hay hiperemia conjuntival ni otras alteraciones oculares ni palpebrales. Ante la sospecha inicial de infestación por Demodex folliculorum, debido a la ausencia de visualización de piojos maduros y la resolución previa completa de la infestación en el cuero cabelludo, se adoptó un enfoque terapéutico mediante el uso de toallitas estériles formuladas específicamente para dicho ácaro. Tras el inicio de dicho tratamiento, comienzan a aparecer piojos móviles maduros adheridos a las pestañas (Figura 1). Se pautó en ese momento tratamiento con vaselina en pomada tres veces al día y se procedió a la eliminación directa de los parásitos, complementado con medidas higiénicas domiciliarias. Se realizaron revisiones periódicas, resolviéndose el cuadro sin recurrencias.

Figura 1. Perlas ovaladas, marronáceas y brillantes junto con piojo maduro adheridos a las pestañas del párpado superior del ojo derecho

CONCLUSIONES

La pediculosis palpebral causada por P. humanus capitis es una afección poco común que se manifiesta con prurito ocular intenso, siendo infrecuente la presencia de otra sintomatología. Más prevalente en la etapa escolar, suele ir acompañada de parasitación del cuero cabelludo. Es esencial diferenciarla de otras infestaciones palpebrales, como las provocadas por Phthirus pubis, debido a las implicaciones diagnósticas y repercusiones en la práctica clínica, así como de la infestación por Demodex folliculorum, un ácaro que parasita los folículos pilosos y las glándulas sebáceas y que puede estar relacionado con diversas afecciones oculares. El diagnóstico se realiza mediante la inspección directa del parásito o liendre, con características morfológicas que varían entre los distintos tipos de pediculosis. Los tratamientos pediculicidas tienen limitaciones debido a su toxicidad en la región ocular. El uso de vaselina como elemento sofocante facilita la retirada manual de los parásitos, siendo considerado el tratamiento más efectivo. Es fundamental realizar una revaloración posterior para garantizar la eliminación completa de cualquier parásito residual.

CONFLICTO DE INTERESES

Los autores declaran no presentar conflictos de intereses en relación con la preparación y publicación de este artículo.

RESPONSABILIDAD DE LOS AUTORES

Los autores han remitido un formulario de consentimiento de los padres/tutores para publicar información de su hijo/a.

Comentarios

Este artículo aún no tiene comentarios.