Vol. 23 - Num. 30
Comunicaciones. Enfermedades infecciosas
Cinta Valldepérez Baigesa, Pepe Serrano Marchueta, Anna Gatell Carbób, Dolors Canadell Villaretc, Mònica Vila de Mugad, Antoni Soriano Arandese
aEquip de Pediatría Territorial del Garraf. Barcelona. España.
bEquip de Pediatría Alt Penedès-Garraf. Vilafranca del Penedès. Barcelona. España.
cPediatra. CAP Barberá del Vallés. Barcelona. España.
dEAP El Carmel. Barcelona. España.
eUnidad de Patología Infecciosa e Inmunodeficiencias Pediátricas. Servicio de Pediatría. Hospital Universitari Vall d’Hebrón. Barcelona. España.
Cómo citar este artículo: Valldepérez Baiges C, Serrano Marchuet P, Gatell Carbó A, Canadell Villaret D, Vila de Muga M, Soriano Arandes A. Papel de los niños en la transmisión del SARS-CoV-2. Estudio multicéntrico colaborativo entre Atención Primaria y hospitalaria. Rev Pediatr Aten Primaria. Supl. 2021(30):104.
Publicado en Internet: 30-11--0001 - Número de visitas: 2607
El papel de los niños en la transmisión comunitaria del SARS-CoV-2 no está totalmente definido, porque presentan formas clínicas leves y con frecuencia son asintomáticos. Además, desconocemos el grado de implicación en la transmisión de esta infección en los núcleos familiares.
Objetivos:
Estudio multicéntrico prospectivo observacional que recoge datos clínicos y epidemiológicos de los niños diagnosticados de COVID-19 por reacción en cadena de la polimerasa o test antigénico rápido entre 1 de julio y 31 de octubre de 2020 en los centros participantes (120 pediatras de 71 centros de Atención Primaria y Hospitalaria). Se recogieron datos clínicos, microbiológicos y demográficos completos de 1040 niños menores de 16 años y de sus contactos intrafamiliares (3392 contactos) y se registraron en la base de datos REDCap® para análisis posterior.
El análisis incluyó test bivariantes para determinar diferencias en los casos índice, secundarios y en las características clínicas, epidemiológicas y sociodemográficas entre el periodo de vacaciones de verano (hasta el 15 de septiembre) y durante la escolarización (hasta el 31 de octubre).
El análisis demostró que un 47,2% de los casos fueron asintomáticos (51,7% durante la escolarización y 43,1% durante el verano), de los que presentaron síntomas estos fueron mayoritariamente leves; los más frecuentes fueron fiebre (71,9%), tos (37,5%), cefalea (23,7%) y fatiga (23,3%). Requirieron hospitalización un 2,6% de pacientes (10,8% tenían comorbilidades), no se reportó ningún fallecimiento y seis casos (0,06%) tuvieron secuelas menores.
Un 72,7% (756/1040) de los casos fueron clasificados como secundarios a una infección en un adulto, un 5,0% (52/1040) fueron secundarios a otro niño y solo un 7,7% (80/1040) fueron índice de la transmisión de SARS-CoV-2. El 14,6% restante no se clasificaron en ninguno de estos grupos. La carga de infección en el núcleo familiar afectó al 62,3% de los convivientes, si bien la tasa de ataque secundario fue mucho mayor si el caso índice era un adulto (67,7%) que si era un niño (59,0%), en estos últimos cabe destacar que la tasa de ataque secundario fue significativamente menor durante la etapa de escolarización que durante el verano.
Nuestros resultados apoyan la hipótesis de que los niños no son el motor de la pandemia y que no tienen un papel importante en la transmisión del SARS-CoV-2 dentro de sus núcleos familiares, incluso durante los periodos de escolarización.
Los autores declaran no presentar conflictos de intereses en relación con la preparación y publicación de este artículo.
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