Diversos sectores de la industria (farmacéutico, alimentario y otros) a menudo ocupan una posición prominente en las reuniones científicas. El objetivo de este artículo es tratar sobre la participación de las industrias de la alimentación y las bebidas (Big Food and Big Soda) en acontecimientos organizados por instituciones científicas del ámbito de la salud y la nutrición, señalando los potenciales conflictos de intereses que surgen de tales asociaciones. Como ejemplo, los autores comentan sobre el acontecimiento nacional organizado el año 2011 en Brasil por una asociación científica del ámbito de la nutrición. El programa científico de este acontecimiento, dedicado al tema de "La nutrición basada en datos probatorios", se vio influido en gran parte por sus patrocinadores corporativos: un simposio de este congreso fue organizado por una empresa productora de bebidas, conocida a escala mundial por sus productos azucarados y clasificada como "patrocinador diamante" del acontecimiento. Mientras se debatía sobre la adopción de modos de vida saludables en el contexto actual de incremento de los casos de obesidad, el ámbito de promoción de la salud se redujo a suministrar información que incitara a elecciones individuales racionales, sin que se tuvieran en cuenta los factores políticos, económicos, culturales, mercadotécnicos y sociales involucrados. Los autores concluyen que los conflictos de intereses existen en la participación de las industrias de la alimentación y las bebidas en acontecimientos científicos sobre temas de salud. La estrategia de las industrias intenta dar legitimidad a la producción y comercialización de sus productos mediante una asociación con prácticas de salud adecuadas. Los profesionales de la salud deben reflexionar sobre tales asociaciones, ya que su principal finalidad no es la promoción de la salud pública sino la generación de beneficios.
Comentarios
Este artículo aún no tiene comentarios.